Junio en Concepción y octubre en Santiago fueron los meses en que los estudiantes de la Carrera pudieron retomar algunas prácticas voluntarias en las respectivas clínicas. Del aforo máximo, las actividades organizadas y la preparación que tomó el regreso, respondieron el Dr. Rodrigo Fuentes, tutor de Clínica en Concepción y la Dra. Andrea Finkelstein, coordinadora de la unidad clínica asistencial-docente en Santiago.
Junio en Concepción y octubre en Santiago fueron los meses en que los estudiantes de la Carrera pudieron retomar algunas prácticas en las respectivas clínicas. El retorno fue preparado, organizado y supervisado por la Dra. Andrea Riffo, coordinadora general de la Clínica Ernesto Silva B. en Concepción y por la Dra. Andrea Finkelstein, coordinadora de la unidad clínica asistencial-docente en Santiago.
Del aforo máximo, las actividades organizadas y la preparación que tomó el regreso, respondieron el Dr. Rodrigo Fuentes, tutor de Clínica y la Dra. Andrea Finkelstein.
¿Cuándo volvieron los alumnos a la Clínica UDD en Santiago y Clínica Ernesto Silva B. en Concepción? ¿Qué cursos partieron con actividades prácticas y cuántos asisten diariamente?
Dr. Fuentes: en la Clínica Ernesto Silva B. los primeros alumnos, de 5° año, volvieron el 3 de junio; se planificaron actividades preclínicas, partiendo con un práctico de endodoncia mecanizada y en otras sesiones continuaron con prácticos de resina compuesta e incrustaciones. El aforo máximo permitido por día era de 10 alumnos por práctico.
Dra. Finkelstein: trabajamos durante toda la cuarentena, preparándonos para el regreso de nuestros alumnos. En octubre tuvimos autorización para abrir las puertas, comenzando con los postgrados de Ortodoncia, Rehabilitación Oral, Periodoncia e Implantología Oral, quienes comenzaron la semana del 5 con atención de urgencias y tratamientos impostergables de sus pacientes en tratamiento. La semana del 12 fue el turno de los alumnos de 2°, 3° y 5° año, con actividades preclínicas en grupo.
¿Cuánto tiempo les tomó preparar el regreso y cuáles fueron las medidas adoptadas en el contexto de la pandemia?
Dr. Fuentes: aproximadamente un mes desde que se decidió retomar las actividades, planificar los prácticos, preparar las instalaciones, los modelos con las piezas dentarias a utilizar para el trabajo en visión indirecta. Todo, con la ayuda del personal de laboratorio y clínica UDD.
Entre las medidas adoptadas incluimos afiches con las medidas de protección e higiene; protocolo de ingreso de alumnos al centro de clínicas UDD; reducción del aforo para actividades; adaptación de fantomas a los sillones clínicos para el trabajo en visión indirecta, cumpliendo con la distancia física permitida entre los alumnos; demarcación y disposición en zigzag de las áreas de trabajo; además de utilización y supervisión del uso correcto de los Elementos de Protección Personal (EPP).
Dra. Finkelstein: la llegada del Coronavirus a la vida del quehacer odontológico significó un gran cambio, nos dio la posibilidad de generar las modificaciones necesarias para tener una práctica segura. Los nuevos protocolos para la seguridad del trabajo de nuestros alumnos, pacientes, docentes y todo personal de Clínica UDD fueron publicados para lectura obligatoria; se realizaron adecuaciones clínicas, señaléticas de flujos de desplazamientos en las áreas comunes, adecuación en las recepciones y botiquines de las clínicas, separaciones en los box de atención clínica; se instaló señaléticas de aforo en ascensores, salas, clínicas, pabellones, casino, biblioteca y áreas comunes de la Clínica.
¿Cómo han visto la respuesta de los estudiantes al volver a la clínica?
Dr. Fuentes: antes de volver, la mayoría de los estudiantes tenía ciertas aprehensiones por la situación sanitaria, pero estando en la Clínica, viendo las medidas adoptadas y los protocolos definidos mostraban más tranquilidad y menos ansiedad. Todos ellos llegaron con actitud positiva, contentos y con ganas de seguir realizando actividades.
Dra. Finkelstein: naturalmente, al inicio, algunos alumnos estaban asustados. Les dimos la bienvenida y se realizaron actividades de bioseguridad y EPP, se reforzaron los contenidos de protocolos y se incentivó a que siguieran las medidas básicas para prevenir el contagio de Coronavirus en todo momento. Con esto, la inseguridad y ansiedad de un posible contagio disminuyó.
Todos los estudiantes se mostraron muy contentos de volver a encontrarse con sus compañeros y poder realizar actividades prácticas.
¿Cómo se han organizado para que todos los estudiantes puedan volver a la clínica? ¿se trata de actividades voluntarias? ¿cómo compensarán la práctica quienes no han podido asistir?
Dr. Fuentes: desde un principio las actividades han sido voluntarias. El objetivo de los prácticos es permitir que los alumnos puedan trabajar en destreza y competencias que son necesarias para la atención de pacientes, que por falta de práctica puedan verse perjudicadas. Los alumnos que no han podido asistir deberían tener un retorno gradual, que les permita tener una nivelación óptima antes de comenzar con la atención de pacientes.
Dra. Finkelstein: las carreras de toda nuestra Facultad han iniciado actividades presenciales de manera voluntaria. Estamos trabajando en grupos de alumnos para poder cumplir con los aforos determinados en la Clínica. Quienes, por problemas de salud, ser pacientes de riesgo o vivir con pacientes de riesgo, no han podido asistir hasta ahora a las actividades prácticas, tendrán la oportunidad de recuperarlas.
Finalmente, ¿cuál es el beneficio que ustedes asignan a que las actividades se retomen lentamente, resguardando las medidas apropiadas?
Dr. Fuentes: los principales beneficios son permitir a los alumnos adaptarse a los nuevos protocolos establecidos, disminuir la ansiedad generada por la falta de práctica clínica y tener aforos definidos de estudiantes en el Centro de Clínicas Ernesto Silva B., resguardando la seguridad de todos.
Dra. Finkelstein: el trabajo práctico es fundamental en nuestra formación como odontólogos, esto necesita práctica y perfeccionamiento de habilidades manuales. Por esta razón, el regreso presencial aunque sea de manera paulatina y con aforos definidos ha beneficiado a nuestros alumnos, ya que tienen la oportunidad de poner en práctica todos los conocimientos teóricos que han recibido durante el año y comenzar a familiarizarse con los nuevos protocolos clínicos.