Qué ocurre cuando un paciente no tiene posibilidades de recuperación fue el eje de esta actividad en la Facultad de Medicina CAS-UDD.
Las implicancias éticas, médicas y legales en torno a las decisiones que se toman frente a pacientes que no tienen posibilidades de recuperación, fueron los ejes de discusión del Foro Interfacultades del Observatorio de Bioética & Derecho de la Universidad del Desarrollo, denominado “Decisiones al final de la vida: una visión ética y jurídica”.
La actividad, organizada en su totalidad por los ayudantes alumnos del Observatorio, convocó a más de 60 asistentes y contó con las ponencias del doctor Juan Pablo Beca, director del Centro de Bioética de la Facultad de Medicina CAS – UDD, y del abogado Alejandro Leiva, docente de la carrera de Derecho UDD.
En este contexto, algunos de los temas tratados fueron el uso de tratamientos fútiles en pacientes que no se recuperarán, prolongar la vida de una persona desvinculada del medio, el temor cultural y desconocimiento de las sociedades ante conceptos como la eutanasia, la diferencia entre provocar la muerte y permitirla, el respeto a la vida, la dignidad de las personas, el deber profesional de los médicos y el marco legal existente en Chile, entre otros.
Además de escuchar las exposiciones de los especialistas, los alumnos asistentes tuvieron la oportunidad de hacer preguntas, resolver dudas y analizar el caso real de una niña argentina y sus padres, quienes solicitaron en su país “una muerte digna” para su hija, logrando incluso cambios en el marco regulatorio existente.
Para el director del Observatorio de Bioética & Derecho, Alberto Lecaros, este evento “tuvo el mérito de ser organizado en su totalidad por los alumnos ayudantes del Observatorio, además de cumplir con la proyección que quiere darle nuestro rector a la Universidad: interdisciplinariedad”.
A esto, agrega que este tipo de actividades son importantes “puesto que alumnos de facultades distintas comparten e intercambian experiencias, conocimientos y reflexiones de sus propias disciplinas. A su vez, a través de diálogo y el debate, adquieren capacidades críticas para razonar sobre conflictos éticos y jurídicos, a los cuales sin duda se verán expuestos como profesionales”.