En una emotiva ceremonia llena de significado, los estudiantes de primer año de la carrera de Enfermería de la Facultad de Medicina Clínica Alemana Universidad del Desarrollo (UDD) vivieron un momento trascendental al vestirse por primera vez con sus uniformes, un paso clave en su formación profesional. Acompañados de sus familias y amigos, estos futuros profesionales de la salud fueron protagonistas de la XXIV Ceremonia de Investidura, marcando el inicio de su interacción directa con los pacientes.
La Dra. Marcela Castillo, decana de la Facultad de Medicina, inauguró el evento con un mensaje de bienvenida, subrayando la importancia de este hito en la formación de los estudiantes: «El cuidado humanizado, la empatía y la ética deben estar presentes en cada una de nuestras acciones. Necesitamos profesionales compasivos, que respondan a las necesidades de los pacientes, sus familias y la comunidad». Asimismo, enfatizó el carácter global de la carrera, que prepara a los futuros enfermeros para desempeñarse tanto en Chile como en el extranjero.
Por su parte, Claudia Pérez, directora de la carrera de Enfermería UDD, destacó el simbolismo de vestir el uniforme por primera vez. «Este uniforme representa un compromiso. Hoy inician un camino lleno de desafíos y satisfacciones, convirtiéndose en parte de un equipo de salud que trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas. Que cada momento de este recorrido les inspire a ser no sólo los mejores profesionales, sino también las mejores personas», señaló Pérez.
El evento incluyó una especial intervención musical a cargo de Belén Carrasco, enfermera UDD, quien deleitó a los presentes con interpretaciones en violín de piezas de David Guetta y Edith Piaf.
Además, los estudiantes escucharon el inspirador testimonio de las hermanas Salazar, Alumni UDD, que actualmente ejercen como enfermeras en España. Ellas animaron a los estudiantes a aprovechar las oportunidades internacionales que ofrece la carrera, destacando la excelente formación recibida, que les ha permitido ser altamente valoradas en su campo profesional.
Como cierre simbólico de la ceremonia, los estudiantes recibieron una piocha con la lámpara de Florence Nightingale, un emblema de la enfermería moderna y del compromiso con el cuidado y la dedicación hacia los demás.
