Los estudiantes de tercer año visten por primera vez los colores que identifican a su profesión y comienzan sus prácticas en los campos clínicos de la Facultad de Medicina.
El pasado 14 de marzo se realizó la ceremonia de iniciación de las prácticas clínicas de los alumnos de tercer año de la carrera de Tecnología Médica, cuando lucen por primera vez el uniforme blanco y burdeo que identifica a los profesionales de la orden en nuestro país.
En la oportunidad, la Directora de la Carrera, María Adriana Parra, saludó a los estudiantes de las 4 especialidades, Morfofisiopatología y Citodiagnóstico, Oftalmología y Optometría, Imagenología y Física Médica y Bioanálisis Clínico, Hematología y Banco de Sangre, diciendo: “Me alegra verlos acompañados de sus seres queridos ya que ellos son parte fundamental junto con la universidad de su formación como personas y como profesionales”.
La Directora los felicito por cultivar el sentido de responsabilidad social, que los ha llevado a vincularse desde el primer semestre con el medio, realizando trabajos voluntarios y otras actividades en pro de la comunidad a lo largo de nuestro país, junto con las demás carreras de la salud. Señaló: “Espero que este uniforme lo luzcan con orgullo, ya que no sólo cambiará su aspecto externo, sino que deberá hacerlos cambiar su actitud. Su vida universitaria hará un giro y tendrán una visión diferente de la vida y de la muerte, les digo que podrán tener dudas, consultar o pedir ayuda si se equivocan en lo que hacen, pero jamás tendrán el permiso de mentir, no olviden que un resultado informado por ustedes o un procedimiento que realicen será fundamental para un diagnóstico clínico y detrás de ese diagnóstico hay un paciente”.
Asimismo, María Adriana Parra, dijo: “Nuestro deber será entregarles competencias para que sean excelentes profesionales, les ayudaremos a adquirir pensamiento crítico y mayor autonomía en sus acciones, lo más importante es que los formaremos como personas, con valores y principios que no se transan como profesionales ni como individuos de una sociedad”.
A continuación instó a los jóvenes a que: “Aprendan a formar equipo y a entregar sin esperar recompensa, ésta llegará sola y si no es así, podrán dormir cada noche tranquilos sin arrepentimiento alguno”.
Agradeció a los padres y apoderados por confiar en la Escuela de Tecnología Médica de la Universidad del Desarrollo: “Una buena carrera, de una universidad de prestigio, con excelentes académicos y con alumnos maravillosos como ustedes”, manifestó.
Posteriormente, se proyectó un video que mostraba los primeros años de vida universitaria de los alumnos, las distintas tareas y actividades académicas dentro y fuera de la Universidad.
En tanto, los estudiantes Daniela Camacho y Andrés Fuentes hablaron a nombre de los alumnos y compartieron algunas experiencias vividas en la Universidad.
También, en un contexto espiritual y respetando los credos y religiones, el diácono Sr. Fernando Guerra entregó una bendición ecuménica a los futuros tecnólogos médicos y a los asistentes.