El Institut Borja de Bioètica se encuentra en España y ya ha realizado distintas actividades académicas con el Centro de Bioética de la Facultad de Medicina Clínica Alemana Universidad del Desarrollo.
El pasado jueves 7 de julio se realizó la firma de convenio entre el Centro de Bioética de la Facultad de Medicina Clínica Alemana Universidad del Desarrollo y el Institut Borja de Bioètica de España.
En el encuentro, el Dr. Juan Pablo Beca, director del centro de Bioética, agradeció esta unión que permitirá crear nuevas instancias de discusión. «Estamos muy orgullosos de trabajar juntos en este proyecto. Nosotros comenzamos con el Curso Intensivo de Bioética y ustedes nos motivaron a crear el Magíster que tanto éxito tiene y que nos permite unirnos a través de su versión online», contó.
Por su parte, la directora del instituto español, Núria Terribas, dijo que «esta experiencia ha sido muy enriquecedora. Es importante hacer este intercambio cultural, ver la visión de los mismos problemas que tenemos nosotros, pero en otra parte del mundo», recalcó.
El Dr. Pablo Vial, decano de la Facultad de Medicina, también quiso agradecer esta colaboración entre ambas entidades. «Nos enorgullece este convenio con gente chilena y española que estimule y promueva la colaboración interuniversitaria», explicó.
Su historia
El Instituto Borja de Bioètica se fundó en 1976 gracias a la iniciativa de iniciativa del Dr. Francesc Abel i Fabre.
Con su creación, se instauró como el primer centro de bioética de Europa, con 30 años de trayectoria en el campo de la docencia e investigación de esta disciplina.
Actualmente, su objetivo principal consiste en analizar los problemas que plantean los progresos biomédicos y su repercusión en la sociedad y en sus sistemas de valores, así como difundir los resultados en publicaciones especializadas.
También promueve el diálogo interdisciplinario como metodología de trabajo entre científicos y humanistas que ayudan a integrar conocimientos científicos y sensibilidad ética, permitiendo profundizar en los planteamientos profesionales y encontrar vías razonables de solución a los conflictos que surgen entre las visiones más técnicas y los valores humanos no técnicos referentes al respeto de los derechos humanos.