Egresada de la primera generación de la carrera de Medicina trabaja por los niños y niñas con mala nutrición en Haití.
La Dra. Carolina Garcés es ex alumna de la Facultad de Medicina Clínica Alemana Universidad del Desarrollo y actualmente becada en Psiquiatría infanto juvenil. Viajó el 2009 para realizar un voluntariado en el consultorio de Puerto Príncipe, en Haití, a través de la Fundación “América Solidaria”. Su estadía fue de 6 meses, donde lo experimentado dio un vuelco en 180 grados a su vida.
Si bien, durante la carrera estuvo relacionada al trabajo social en campamentos, al egresar conoció más de cerca la realidad haitiana a través de los relatos de la Dra. Carmen Lagos y el Dr. Pablo Sandoval, quienes ya habían comenzado con un Programa de desnutrición infantil… la situación a la que se enfrentó fue muy distinta a la imagen que preconcebida.
Los cifras hablan de un Haití con tres médicos por 10.000 habitantes como promedio y servicios de salud para sólo la mitad de la población. Una esperanza de vida de 61 años y un cuarto de los partos atendidos por personal capacitado. Además, 12 de cada 100 niños no alcanzarían a cumplir los 5 años (en Chile la tasa de mortalidad infantil se podría entender como menos de 1 por cada 100).
“Creí poder imaginar que un niño de 6 meses -por la falta de lactancia materna y de suplementos adecuados- pesara lo mismo que un recién nacido normal (3,5 kg)… Pero cuando enfrenté la desnutrición día a día, cuando tenía que elegir pacientes para atender de una interminable fila que llevaban horas esperando en los flacos brazos de sus padres que miraban entre asustados y resignados… quedé perpleja”, recuerda la profesional de la salud.
Los voluntarios tuvieron que enfrentarse a historias de madres que por su propia desnutrición, escasos suplementos nutritivos durante el embarazo, hemorragia aguda postparto o desconocimiento de porqué y cómo realizar una adecuada lactancia materna, remplazaban la leche por lo que tuviesen a mano -fuera café oagua con azúcar- satisfaciendo el hambre a ratos.
Observaron que a medida que mejoraban el estado nutricional de madres e hijos, a través de las donaciones de leche, de la educación sobre manejo del agua y lactancia, fortalecían todos sus sistemas, permitiéndoles a muchos poder empezar a caminar o hablar, mejorando el vínculo con su familia y recuperando todo el retraso que poseían.
Carolina cuenta la reflexión que le dejó esta experiencia en Haití: “¡Teníamos que continuar con el programa de desnutrición a toda costa! Teníamos a nuestro favor un equipo de voluntarios en terreno comprometido y conmovido a diario. Fue así como volví de Haití con una mochila tan pesada como hermosa y gratificante, marcada por ideales y esperanza de poder mejorar las cosas”.
Con toda la fuerza y motivación de un grupo de jóvenes profesionales que, marcados por los rostros e historias que están detrás de los índices de pobreza, nace la fundación “Leche para Haití”. Su misión es contribuir a la superación de la desnutrición infantil en la isla y generar mayor conciencia en Chile sobre las carencias experimentadas en lugares como éste.
Finalmente, luego de un tiempo trabajando en la formación legal de la institución, el jueves 1 de septiembre de 2011, en la sala 5 del Cine Hoyts de la Reina, se llevó a cabo el lanzamiento oficial de la Fundación, oportunidad donde se presentó el documental “Lejos de Haití”.
Si estás interesado en colaborar, puedes hacerlo directamente Cuenta Corriente del Banco BICE: