¿Por qué contar con un Centro de Humanidades en una Facultad de Medicina? ¿Cuál es la importancia de promover las humanidades en la formación de futuros médicos y profesionales de la salud? Esta fue la pregunta guía que abordó Carla Benaglio, vicedecana de Desarrollo de la Facultad de Medicina Clínica Alemana UDD, en un nuevo Coloquio de Humanidades.
En esta ocasión, la actividad se insertó en una de las reuniones clínicas de C. Alemana, espacios de encuentro y de reflexión para la comunidad médica donde destacados expositores nacionales e internacionales presentan temas de actualidad o del ámbito científico y académico.
Carla Benaglio, enfermera y doctora en Ciencias Humanas de la Universidad de Verona (Italia), fue hace 14 años una de las fundadoras del Centro de Humanidades Médicas de la Facultad de Medicina CAS UDD y ha incorporado desde hace 20 años las humanidades en la docencia para la formación de los profesionales de la salud, intencionando temáticas de Medicina Narrativa.
En este contexto explicó que fue el doctor Edmund D. Pellegrino, médico estadounidense especialista en Bioética (1920-2013), quien fue pionero en introducir las humanidades en las facultades de Medicina con la finalidad de acercar la biografía del paciente y su historia de enfermedad a los aspectos más biológicos de ésta y que están reflejados en las fichas clínicas.
Luego realizó un breve recorrido sobre el concepto de las Humanidades Médicas (HM) bajo la definición de Shapiro, J (2009), “Las HM utilizan metodologías y contenidos de las disciplinas humanísticas con el fin de investigar la enfermedad, el sufrimiento, la discapacidad, el dolor y otros aspectos de la medicina y la práctica de los profesionales de la salud”. Y entregó algunos ejemplos de sus posibilidades y usos pedagógicos a nivel internacional y nacional.
Según detalló, existen muchas evidencias sobre las competencias que logran las humanidades en temas como sostener la vocación y el profesionalismo, la comprensión y la conexión con la experiencia del otro, el autoconocimiento y la espiritualidad, entre otros. E indicó que es muy importante que la formación en humanidades sea constante y acompañe al estudiante durante todo su proceso formativo.
En este sentido, a nivel filosófico se detuvo en reforzar el concepto de profesionalismo y también de cuidado, que están íntimamente ligados. Según indicó es tan propio de las profesiones de la salud, el cuidar a un otro bajo esa promesa inicial de “cuidar de la mejor manera posible”. En este punto, se refirió a Mortari (2015) para quien “El cuidado protege la vida y cultiva las posibilidades de existir. Mantiene el ser inmerso en lo bueno”.
Desde el Centro de Humanidades Médicas se realizan actividades de docencia insertas en el currículo de pregrado y postgrado; y también programas extracurriculares que generan vinculación con los campos clínicos y hacen comunidad. Entre estas iniciativas destacó el programa de Coloquios de Humanidades que nació hace 12 años en el Hospital Padre Hurtado y que hoy está en cinco campos clínicos (Hospital FACH, Instituto Nacional del Cáncer, Clínica Alemana Santiago y Cesfam Malaquías Concha además del HPH), la compañía TeatroSoma Dr. Juan Carlos Glasinovic, el grupo de lectura La Cofradía de los Lectores, y el Concurso Artístico y Literario UDD.
Benaglio destacó la gran visión que tuvo el Dr. Pablo Vial, fundador de la Facultad de Medicina, quien asumió este desafío humanístico desde un inicio y comprendió la importancia de las humanidades al interior de una Facultad de Medicina. Así mismo, agradeció especialmente al equipo interdisciplinario de colaboradores del Centro de Humanidades Médicas, y a las profesionales que la han sucedido en el rol de dirección, Susana Dörr Álamos, y actualmente Macarena Barros Jiménez, para proyectar y articular un programa anual sólido y coherente con la visión y misión de la Facultad.
